Fatas Morganas

Llega un minuto en que te preguntas: cómo puede vivir esta gente aquí?
Y la verdad si no logro conversar con alguno de los habitantes de sector que me esplique las motivaciones para no salir corriendo del sector no lograré nunca entender como lo hacen para aguantar los 46 grados de calor que en este minuto nos golpean a los 40 pasajeros del Golondrina de las 12:15hrs con destino Quillota desde Santiago, y de los cerca de 500 vehículos, o mas, que nos acompañan.
Son las 14:00 hrs y no la queremos creer en el bus. Los trabajos de la cuesta de "Las Chilcas" tienen libre solo una vía disponible hacia el norte y realmente afecta el tránsito ya que el taco es de cerca de 8 kilómetros y con los 46 grados afuera, mas la sensación térmica del interior del bus que, como todos los Quillotanos sabrán, de aire acondicionado ni hablar, ni menos de ventanas que se puedan abrir, realmente son una mezcla digna de tortura.
Sorprende ver algunos cabrios pastando bajo la resolana directa del sol y parecen ni inmutarse, parece ser lindo el paisaje que a ratos queda atrás para volver a detenerse unos metros mas adelante, pero la verdad no puede estar mas lejos de ser una linda postal, ya que los mismos vehículos formados ordenadamente en fila india no dejan ni ver, por ultimo, el regalo que la naturaleza da a los visitantes de carreteras en sitios muy calurosos las atractivas "Fatas Morganas".

Fin de la Wain?

Recién este Sábado me enteré de la catástrofe y aún no me repongo del golpe.
Alejandro Jimenes me podría decir mil veces que esta feliz de estar
ahora oficialmente en la web y que es un lujo imprimir y que hay
prioridades ecologicas y esas cosas, totalmente valorables, pero la
verdad no le creo.
Me hubiese gustado leer la noticia acompañada de un plan de
contingencia claro y definido y no un "tal vez imprimamos
algo....quien sabe"...me hubiese gustado un camino mas terrenal y no
un sendero de niebla e incertidumbre.
Además de que ese punto de que "están felices porque así no tiene
fecha de salida"... es justamente al revés lo que pasa con la Wain que
la hace tan especial y es que cada uno espera la salida del número del
mes y ese momento especial en que te topas con la revista en el kiosko
y te alegras de que ya la tienes junto a ti y la lees con ganas y
tienes un mes para comentarla con quienes quieras y todo sin apuros ya
que la siguiente viene para el próximo mes, no te pierdes de nada
mientras tanto, y si te topas con otro "wainer" sabes que no tiene mas
información que tu porque aún no sale la nueva edición, y puedes
hablar de lo mismo por un buen rato. En la web toda la gente que lee y
sigue a la Wain estará recibiendo distinta info dependiendo de cuando
se metió al sitio o al adictivo facebook. Se diluyen de los intereses
comunes y cada cual comienza a sacar los provechos que puede o quiere
y ya es mas difícil compartir una conversación de intereses comunes.
Osea es ir en contra de la misma esencia de la revista ya que ésta
habla del vino y el vino será siempre el placer de conversar en
persona con amigos, conocidos y los no tanto.... muy lejos de lo que
un tema digital y virtual permite.
Realmente no puedo creer que la Wain se acabe como revista porque no
es negocio. Cómo no va a poder sustentarse una revista de esta
calidad?, si hasta la Vanidades la leia mi tia abuela!!!.
Me entristece mucho ya que hoy por hoy, al pasar por momentos
difíciles económicos me permito comprar la Wain sólo si puedo, en esos
viajes de provinciano a la capital y se ha transformado en mi único
nexo con ese mundo exquisito del vino al cual viajo cada vez que puedo
comprar una botella en el super.
Lo cierto es que creo firmemente que esta revista iba por el camino
correcto, por el sendero de la verdad, la sabiduría y la amistad. Una
revista completa, elegante, pero de lenguaje medio "wachaca" que, si
no era real, no importaba, salia natural y eso la gente de la media
Chilena como yo, agradecía....sí agradecía y mucho ya que en el
inconsciente colectivo se sigue entendiendo al "Vino" como un mundo
fascinante, atractivo, potenciador... pero excluyente y "pepepato", y
por ello se marca la diferencia entre tomarse un Ron o un Vino al
salir con unos amigos a un local o al carrete económico de la casa de
alguien.
Yo sentía como reales los esfuerzos por sacar de este estigma al vino
en su propia tierra, sentía que las palabras de Tomas Olivera por
defender, potenciar y posicionar la comida Chilena  tenían peso en el
rubro por medio de la Wain y parece que no es tan así, parece que
efectivamente el buen beber y comer seguirá siendo un derecho de solo
los de "elite" de esos que comen y beben para mostrar por Instagram
pero no para compartir con distintas personas una mesa con "conversa y
alcuza".
De verdad creo que todos tenemos derecho a disfrutar de cosas y
placeres en solitario o con quienes nos interesan pero ese afán de
demostrarle al otro que tengo mas que el, que puedo comer mejores
cosas que el, que mi auto es mejor que el tuyo, que tomo mejor vino
que tu....ha hecho que este país se disgregue tanto, se segmente tanto
que si seguimos así haremos que Chile no se dispare nunca como foco
turístico mundial ni interno. Si seguimos entendiendo a los garzones
como personas que "sirven" al otro, tomando su significado mas
peyorativo, cosa que hasta ellos mismos se creen y por ello muchos de
ellos, ademas de mal pagados, encuentran en como los tratan tanto
clientes como jefes, la razón para atender como las "tristes" a quien
no cuadra con el perfil del cliente perfecto y desear cada día el
encontrar luego otra pega.
El hecho de que en el mundo del vino no se tome la premisa de que " el
mejor vino del mundo es el que me gusta a mi y punto" y nos
enfrascamos en conversas y discusiones de" que este es mejor" o" ese
es peor" o "que como se te ocurre tal vino".....si en definitiva la
maravilla del vino es su ambiente, su escenario, su recuerdo. Es por
esto que el vino como industria no pega en Chile, no se dispara porque
el chileno ante la posibilidad de demostrar ignorancia se abstiene de
enfrentar cosas nuevas y es labor de la industria tentar al individuo
a lanzarse, por ello creía en la Wain por ello creía en las ideas, que
salían en la conversas con mis amigos sommelieres Felipe Rojas y
Basilio Barros, personas que me enseñaron a conocer el vino y sus
maravillas, respetando que me gustara el Gewürztraminer de "La
bicicleta" de Viña Conosur que valia $1990. Gracias a la confianza que
me daban ellos en sentirme en casa al momento de probar un vino y que
nadie se reiría de mi por dar mi opinión sobre el v fue que me decidí
por seguir probando y probando vinos en compañía de quien quisiera
dármela.
Y así un tremenda cantidad de ejemplos y situaciones que, al sumarle
la desaparición de la Wain de los kioskos, me dejan con las esperanzas
muy por debajo de que algún día pueda ir de nuevo al Normandie o  a
una Gala del Vino y no sentirme como fanatico de la Guerra de las
Galaxias en un convención de Star Trek, osea, mas perdido que el
querido teniente Alejandro Bello.

Tan importante ha sido para mi esta noticia que he vuelto a escribir
después de mucho tiempo y tal vez siga por esta senda.....quien sabe.
De todos modos agradezco la oportunidad de escribirles, si me pescan o
no.....quien sabe. Por lo menos dije les dije lo que siento

Sorry pero no les concedo el placer de decirles que los extrañaré.

Alejandro Barros
Quillotano
Lector de la Wain